Carolina Marín se retira por lesión de las semifinales de los Juegos Olímpicos después de imponerse en el primer set (21-14) y tras ir ganando 10-6 en el segundo parcial ante la china He Bing Jiao.
El peor desenlace posible. Carolina Marín acariciaba la final olímpica de bádminton hasta que su rodilla derecha dijo ‘basta’. Cuando el marcador indicaba 10-6 en el segundo set a favor de la española, una desafortunada jugada confirmó su lesión.
En Tokio no pudo estar presente por la misma lesión. En París, cuando todo parecía encarrilado, se produjo el final más cruel que enmudeció a todo el Arena Porte La Chapelle. Tras la jugada fortuita, Carolina intentó disputar dos puntos más pero el dolor de su rodilla la obligó a abandonar la pista.
Con 31 años, la campeona olímpica de Río 2016, se retira de París 2024 entre lágrimas y ante el aplauso de todo el público que despidió a la onubense. En zona mixta, su entrenador Fernando Rivas confirmó su estado.
“La verdad que no tenemos palabras para definir este momento”, afirmaba Fernando Rivas. Hay que valorar la lesión y estar tranquilos. Estaba muy cerca de la final. Es muy triste”.
“Ella decía que no era justo. Y que no quería acabar los Juegos Olímpicos de esta forma. Se merecía terminar de otra forma”, indicaba el entrenador.
“Era imposible que continuara jugando. Ya lo habéis visto, que lo ha intentado. Pero era imposible”, reconocía.